Por
lo regular, el
ciclo menstrual de la mujer tiene lugar cada 28 días, aunque algunos
especialistas consideran normal un ciclo que oscila entre los 21 y los 35 días,
contando siempre a partir del primer día de la menstruación y hasta la
aparición de la siguiente. Sin embargo, en cuanto a la duración de la
regla, esta varía de un ciclo a otro y puede ser incluso diferentes entre una
mujer y otra.
Los síntomas de una
alteración hormonal suelen confundirse con otras afecciones comunes, por ello,
es importante acudir a un médico, realizar una revisión completa y obtener un
diagnóstico.
Al respecto el
Dr.
Saúl Barrera, Director Médico
de IVI
Panamá, destaca que, “es importante tomar en
cuenta que algunas señales de alarma pueden ser la disminución o aumento
sustancial de la cantidad de sangre eliminada, que la frecuencia del ciclo
menstrual sea mucho mayor o menor a los 28 días entre cada ciclo o por la
duración de la menstruación”.
A continuación, compartiremos información que
servirá como referencia para sospechar una alteración hormonal, que pueden ser
severos o persistentes, como la Hipermenorrea, Amenorrea,
Polimenorrea, Menometrorragia, Hipomenorrea, Dismenorrea y Oligomenorrea.
Cuando algo no está bien
La
actividad hormonal desempeña un papel muy importante en la salud de todo el organismo,
e interviene tanto en el aspecto físico como el mental. Por ello, sufrir
un desequilibrio hormonal trae consigo trastornos que afectan la calidad de
vida, de una forma u otra manera.
Cuando la regla no llega en el
momento que debería llegar, puede ser por dos razones: bien porque existe un
embarazo, o porque existe una razón por la que el cuerpo no está funcionando de
manera correcta.
Cuando ocurren o se
producen síntomas en la regla o alteraciones en el ciclo menstrual, esto podría
ser signo de alguna patología que deba ser tratada y que afecte tanto a la
fertilidad de la mujer como a otros ámbitos de la salud, particularmente su fertilidad.
Una alteración de la ovulación puede
estar ocasionada por razones fisiológicas o relacionadas con una alteración en
la hipófisis, que es la parte del cerebro que regula las hormonas.
Alteraciones menstruales durante la adolescencia
En función de cuando se den los primeros indicios de
pubertad, la regla llegará antes o después, estimándose un intervalo normal
entre los 10 y los 15 años, pero esta edad puede variar de un país a otro. Esta
primera menstruación que marca una etapa importante en la adolescencia se
conoce con el nombre de menarquia, y suele llegar precedida de un aumento en el
flujo vaginal.
Para el Dr. Saúl Barrera, Director Médico de IVI
Panamá, “Es importante valorar si
la primera regla no logra aparecer en torno a los 16 años, en caso contrario
será necesario consultar con el médico, considerando que la amenorrea primaria
puede deberse a una ausencia de hormonas, quistes en los ovarios o incluso enfermedades
congénitas que afecten al desarrollo normal del útero y la vagina”.
Mayor atención en la vida
fértil
Es importante saber que las
alteraciones menstruales pueden ser más frecuentes en los dos extremos de la
vida fértil de las mujeres, la cual abarca desde la adolescencia y después de
los 40 años, conforme la mujer se acerca a la menopausia.
Estas alteraciones pueden
incluir ausencia de la regla, variaciones en el tiempo transcurrido entre los
ciclos, duración anormal del periodo o un exceso/escaso sangrado. Cuando una
mujer que tiene la regla normalmente comienza a presentar alteraciones
menstruales, es fundamental que sea valorada por un ginecólogo.
Durante los primeros meses
tras el comienzo de la primera regla es frecuente que los periodos sean
irregurales, aunque a medida que pasa el tiempo y el cuerpo va madurando, se
irá alcanzando una regularidad (aproximadamente, entre uno y dos años después
de esta primera menstruación). En caso de que esta regularidad no se produzca,
podríamos estar ante alguno de los problemas arriba descritos, por lo que se
debería consultar con el ginecólogo.
Trastorno menstrual y fertilidad
Es indudable que los trastornos menstruales afectan
a la fertilidad y aunque no hay datos estadísticos del número de mujeres que
sufren trastornos menstruales como la amenorrea, dismenorrea, síndrome
premenstrual entre otros, la realidad es que afectan a un alto porcentaje de
mujeres”, afirma el Dr. Barrera.
En IVI Panamá, es muy
frecuente que a las consultas de reproducción asistida acudan muchas mujeres
con desórdenes en la menstruación que
les dificultan quedar embarazadas y cumplir el sueño de ser madres, razón por
la cual tener ciclos menstruales regulares ayuda la mujer, mientras que cuando los ciclos son irregulares (uno
de los trastornos de la menstruación más habituales) la situación se complica,
razón por la cual lo recomendable es acudir al médico especialista para que les
explique los tratamientos que existen para conseguir el embarazo.
Al respecto Saúl Barrera señala “lo aconsejable es hacer
un estudio hormonal y ecográfico para valorar la situación y actuar de acuerdo
con el diagnóstico con un tratamiento u otro, también hay ocasiones en las que
las mujeres acuden porque sufre amenorrea o falta de regla, lo cual es otro problema que pueden
padecer las mujeres y que está relacionado directamente con la fertilidad”.
La amenorrea puede ser de
carácter permanente o temporal, durante el tiempo que equivaldría a 3 ciclos o
a un periodo de 6 meses y puede ser primaria, es decir, cuando una mujer nunca
ha tenido la regla a una edad de entre 14 y 16 años; o secundaria, es decir,
cuando después de haber tenido reglas, estas desaparecen durante 6 o más meses
y pueden tener origen en el cerebro, responder a un fallo ovárico o estar en la
zona genital, vagina y útero de la mujer.
“Sin duda, la complejidad
de enfermedades y alteraciones que
causan amenorrea son amplísima, las cuales pueden ir desde síndrome de ovarios poliquísticos o
hiperprolactinemia, hasta el fallo ovárico precoz, alteraciones
en el peso o causada por ejercicios
intensos”, destaca el especialista de IVI
Panamá.
Debido a la relación entre los
trastornos menstruales y la fertilidad a corto, medio o largo plazo, para las
mujeres que tienen alguno de estos problemas, es importante siempre valorar la reserva de óvulos para preservar la fertilidad.
En estos momentos en los que la maternidad se retrasa cada vez más, es importante tener en cuenta
esta opción para en un futuro poder ser madres con sus propios
óvulos en lugar de recurrir a donantes.
Comentarios
Publicar un comentario